La Inflamación Crónica (IC) es una condición fisiológica que se asocia con diversas situaciones patológicas, por ejemplo, resistencia a la insulina, aterosclerosis, neurodegeneración, crecimiento tumoral, etc. Esta situación está asociada a varias enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes, demencia, enfermedad pulmonar obstructiva, etc. Por motivos como los anteriores, diversos investigadores prestan especial atención a estrategias para el tratamiento de la IC y uno de los más recomendados es realizar algún tipo de ejercicio. Alguna evidencia sugiere que practicar ejercicio aeróbico o de resistencia durante 3 a 12 meses puede mejorar las condiciones inflamatorias crónicas en adultos mayores sanos y personas con diabetes, cáncer, enfermedades cardiovasculares y obesidad. Entre los marcadores proinflamatorios que disminuyen durante la actividad física en la evidencia previamente mencionada se encuentran: interleucina-6, factor de necrosis tumoral-alfa y proteína C reactiva. Se propone que lo anterior se logre a través de varias modificaciones corporales provocadas por el ejercicio, así como la liberación de miosinas, con funciones antiinflamatorias en el tejido muscular. Al parecer la intensidad del ejercicio no parece influir en el grado de reducción de los estados inflamatorios crónicos, sin embargo, el tiempo de realización de ejercicio físico si se asocia con el porcentaje de reducción de dichos estados. Esto significa que algunos de los beneficios para la salud de la actividad física están asociados con la disminución de la IC. Más información Rutina de ejercicio (Pecho Trx)
