Salud mental asociada a la disforia de género

Disforia de género, es un término utilizado para describir la angustia persistente relacionada con el sexo biológico/las características sexuales y/o el género al nacer. Existen dudas sobre si y en qué condiciones los niños y adolescentes que viven esta situación se benefician de la transición social de género, es decir, de vivir en el género en el que creen, en lugar del género asignado al nacer, lo que puede implicar cambiar sus características físicas de género, como cabello y ropa, así como su nombre y pronombres de género. Esta cuestión es particularmente apremiante, dado que los niños y adolescentes que experimentan disforia de género, o con otras variantes de género, muestran una mayor prevalencia de dificultades de salud mental que sus pares cisgénero. Por ejemplo, algunos estudios muestran que entre los niños prepúberes diagnosticados con disforia de género (de 12 años o menos) muestran que hasta el 21% cumple con los criterios para un trastorno de ansiedad, casi la mitad tiene antecedentes psiquiátricos importantes y aproximadamente el 10% ha intentado alguna vez suicidarse. En esta población, la prevalencia de trastornos del estado de ánimo oscila entre el 30 y el 78%, los trastornos de ansiedad entre el 21 y el 63% y la ideación suicida entre el 12 y el 74%. En la mayoría de los casos, los síntomas relacionados con la salud mental de las personas con disforia no sólo están relacionados con este proceso, sino también con otros eventos cotidianos contextuales. Hasta ahora, se ha demostrado, que la transición social de género ayuda a la salud mental de l@s niñ@s con disforia, pero aún no está claro qué edad es apropiada para dar este paso. Más información

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