La actividad física se sabe en un factor clave para mantener una salud física y mental adecuada. Sin embargo, un gran sector de la población no cumple con los tiempos mínimos de este tipo actividad, los cuales, se ha calculado, deben de ser 150 a 300 minutos a la semana. Entre las causas por las que las personas no practican ejercicio recurrentemente encontramos, falta de motivación, dolor o incomodidad física, mala salud, fatiga, poca energía, falta de tiempo, por decir algunas. Para contender con estas dificultades se han diseñado distintas estrategias de entrenamiento, por ejemplo, la Actividad Física Intensa e Intermitente durante la Vida Diaria (AFIIVD), la cual se refiere a episodios breves y vigorosos de ejercicio que duran de 1 a 2 minutos y que se realizan durante las actividades diarias. En esta estrategia de entrenamiento se incluyen tareas como cargar bolsas de compra, cargar niñ@s o caminar cuesta arriba. La AFIIVD, como se puede observar, es una perspectiva flexible que permite estar físicamente activo sin invadir la cotidianidad de las personas, además no requiere preparación o acceso a instalaciones y así se permite que se alcance una actividad física adecuada conforme al tiempo dispuesto. Estudios indican que tres sesiones de AFIIVD al día, con una duración equivalente a uno o dos minutos cada uno, se asociaron con una reducción del 38 al 40% de padecer cáncer y una disminución del 48 al 49% de muerte por enfermedad cardiovascular. Tan solo 4.4 minutos de AFIIVD al día se ha relacionado con una reducción del 26 al 30 % en el riesgo de mortalidad por cáncer y una disminución del 32 al 34% de muerte por un Evento Cerebro Vascular. Esto muestra que la AFIIVD es una opción de cuidado de la salud adecuada para la vida actual, sin embargo, es recomendable diseñarla con ayuda de l@s profesionales especializad@s.  

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