En la actualidad hay confusión en la diferencia entre orientación e identidad sexual, la primera, por su parte, se refiere a los patrones de excitación y deseo sexual, romántico y afectivo de un@ individu@ por otras personas en función del género y sus características sexuales. Dicho aspecto de la sexualidad está relacionado con impulsos fisiológicos individuales que están más allá de la elección consciente y que involucran fuertes sentimientos emocionales. La identidad sexual, por otro lado, es lo que se denomina un reconocimiento consciente y la internalización de la orientación sexual por parte del@ individu@. Este elemento está vinculado con factores relacionales e interpersonales que pueden generar comunidad, apoyo social, modelos a seguir, amistad y parejas. Así se plantea a la identidad sexual, como un elemento que tiene inherente a la orientación sexual, siendo la primera el reconocimiento consciente de la segunda. La identidad sexual se desarrolla a través de un proceso social por el cual las personas conocen y definen sus necesidades sexuales, valores, orientación, preferencias por ciertas actividades sexuales, modos de expresión sexual y características deseadas en una pareja. Además, esta evolución va acompañada de un entendimiento, explícito o implícito, de su pertenencia a un grupo de identidad sexual que corresponda con sus actitudes, creencias y valores. En resumen la identidad sexual es el reconocimiento que una persona hace acerca de su ser sexual.
